jueves, 24 de enero de 2008

Centenario de la masacre de trabajadores en la Escuela de Santa María de Iquique

21 de diciembre de 1907, el ejercito Chileno asesina a mas de 3000 entre trabajadores y sus familias, en la escuela de Santa María de Iquique.

Hace mas de 25 años que en aquellas tardes de ocio juvenil, en casa de mis queridos amigos "Moncho" y "Gola", descubrí un disco que contenía una historia dramática y desgarradora, contada con una preciosa música, interpretada por Quilapayun.

Ese disco era la "Cantata de Santa María de Iquique", en él se cuenta como mas de 3000 trabajadores de las minas de salitre del norte de Chile, fueron asesinados por el ejercito chileno.


Los Pampinos (denominación con la que se conoce a estos trabajadores) trabajaban en las minas propiedad de empresas inglesas, estas les pagaban el salario con fichas, no con dinero, fichas que sólo eran válidas en las "pulperías" tiendas de las propias empresas, donde engañaban a los compradores y les vendían productos de muy mala calidad. Los patrones contrataban guardias para espantar a los vendedores ambualantes y evitarse así la competencia.


Por otro lado, las condiciones laborales de los salitreros "pampinos" eran inhumanas, no contaban ni con las mas mínimas medidas de seguridad Laboral, es mas unas de las reivindicaciones que les llevó a la huelga fue la exigencia de cubrir los "Cachuchos"-balsas de agua hirviendo- en las que no había día que no muriera algún trabajador al caer en su interior.

Mejoras salariales, eliminación de las fichas, libertad de compra y una reja de protección para los cachuchos eran sus principales reivindicaciones.

Aburridos de no conseguir nada decidieron viajar hasta la capital Iquique, donde los instalaron en los locales de la Escuela de Santa María de Iquique.

El día 19 de diciembre el gobierno declaró el Estado de sitio y el 21 de diciembre de 1907 el comandante Silva Renard mandó ametrallar a los obreros y a sus mujeres e hijos, murieron entre 3000 y 3600 personas.


La cantata comienza diciendo: "Señoras y señores, venimos a contar aquello que la historia no quiere recordar, pasó en el norte grande, fue Iquique la ciudad, 1907 marcó fatalidad. Ayá al pampino pobre mataron por matar, seremos los hablantes diremos la verdad, verdad que es muerte amarga de obreros del salar. Recuerden nuestra historia de duelo sin perdón, por mas que el tiempo pase no hay nunca que olvidar..."

No hay comentarios: